viernes, 14 de marzo de 2008

Lo que la Real Academia Española tiene que decir sobre la Guía para Dirigentes de la Rama Caminantes

Yo sigo terriblemente preocupado por el hecho de que la OSI esté planteando redefinir el concepto "adolescencia". Como recordarán, yo fui uno de los ilusos que se tragó el cuento de que de algo servía leer la Guía para dirigentes de la rama caminantes antes de su publicación para hacerle comentarios. Y en ese entonces uno de los comentarios que cualquiera con secundaria completa tenía que hacer estaba relacionado con la definición de adolescencia que planteaba.

Haciendo gala de una audacia intelectual sin precedentes, la OSI replantea la adolescencia (Capítulo 1, página 18):
Se suele aludir a la adolescencia como un período tormentoso (...) Esta tendencia se debe en parte a que los adolescentes analizados en profundidad y los que se destacan socialmente son, con frecuencia, jóvenes enfermos en circunstancias sociales extremas. Erróneamente, se tiende a identificar a la población adolescente en general con estas características.
O sea, claramente nos está diciendo: la adolescencia no es un periodo tormentoso y esa idea se debe a que por alguna extraña razón hemos proyectado las características de jóvenes enfermos (¡ENFERMOS!) a todos los adolescentes. Y que eso de que es una etapa tormentosa es una imagen originada por estudios hechos a poblaciones no representativas, como claramente lo demostrarían dos estudios descritos en la Guía: uno hecho en Chile y el otro en Estados Unidos.

Desde que leí esta atrocidad científica hace varios meses he estado consultando con distintas personas acerca de a qué se pueden estar refiriendo. ¿Hay un mensaje en clave escondido? ¿Tengo que contar cada tres letras, cada cuatro? Porque obviamente, como persona educada que soy, que sé leer y que puedo hacer operaciones aritméticas sencillas, jamás voy a creer esta nueva definición revolucionaria.

Por lo pronto, tengo un dilema práctico muy sencillo. Supongamos que la palabra "adolescencia" viene de "adolecer", que según la Real Academia Española significa:
1. tr. ant. Causar dolencia o enfermedad.
2. intr. Caer enfermo o padecer alguna enfermedad habitual.
3. intr. Tener o padecer algún defecto. Adolecer DE claustrofobia.
4. prnl. compadecerse (‖ sentir lástima).
Yo me pregunto, ¿a cuál de estas cuatro definiciones se refieren? Me parece que a ninguna. Entonces, si desean incluir una nueva acepción a la palabra, yo no tengo ningún problema. Pero tienen que seguir un procedimiento (sobre el cual se pueden informar en la sección La política lingüística panhispánica de la página web de la Real Academia Española. Provecho).

Por lo pronto, no sé por qué, pero entre una contradicción entre una postura de la OSI y una de la Real Academia Española... me inclino por la Real Academia, que no por nada es desde 1713 el referente máximo con respecto a la correcta habla en nuestro idioma. Cualquier editor de estilo estará de acuerdo conmigo.

Y por si acaso, en el Diccionario de la Lengua Española que edita hay palabras en jerga y vocablos relativamente nuevos, como Chifa, del cual define:
1. m. Perú. Restaurante de comida china.
2. m. Perú. Comida preparada al modo de los chinos en un chifa.
O sea, el Chifa Wa Lok tiene más respaldo académico que la OSI. Eso debería preocuparnos un poquito.


Actualización (21/03/2008): Ante el comentario de Arturo sobre el origen de la palabra "adolescencia"... Aquí pongo lo que el diccionario Latín - Castellano tiene que decir al respecto:
Adolescentia
Palabra: adolesco,is,ere,adolevi,adultum
Significado: crecer,arder
Tipo: verbo
Flexión: 3ª Conjugación
Tiempo: Presente
Modo: Participio
Voz: Activa
Caso: Nominativo
Numero: Plural
Genero: Neutro
Ahora, en aras a la transparencia, aquí lo que la Real Academia Española arroja para "crecer":
1. intr. Dicho de un ser orgánico: Tomar aumento natural. Apl. a pers., se dice principalmente de la estatura.
2. intr. Dicho de una cosa: Recibir aumento por añadírsele nueva materia. Crecer el río, el montón.
3. intr. Adquirir aumento. Crecer el tumulto.
4. intr. En las labores de punto, ir añadiendo puntos regularmente a los que están prendidos en la aguja, para que resulte aumentado su número en la vuelta siguiente. U. m. c. tr.
5. intr. Dicho de la Luna: Aumentar la parte iluminada del astro visible desde la Tierra.
6. intr. Dicho del valor de una moneda: aumentar.
7. tr. ant. aventajar.
8. prnl. Dicho de una persona: Tomar mayor autoridad, importancia o atrevimiento.
Y aquí lo que arroja para "arder":
1. intr. Estar en combustión.
2. intr. Dicho de alguna parte del cuerpo: Experimentar ardor.
3. intr. Dicho del estiércol: Repudrirse, produciendo calor y vapores.
4. intr. Estar muy agitado por una pasión o un movimiento del ánimo. Arder DE, o EN, amor, odio, ira
5. intr. Dicho de una guerra, de una discordia, etc.: Ser muy vivas y frecuentes. Arder EN guerras un país
6. intr. poét. resplandecer (‖ despedir rayos de luz).
7. tr. p. us. abrasar (‖ reducir a brasa). U. t. c. prnl.
8. prnl. p. us. Dicho de la mies, de la paja, del trigo, de las aceitunas, del tabaco, etc.: Echarse a perder por el excesivo calor y la humedad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No he terminado de leer tu post, cuestión de tiempo. Pero, de arranque, cometes un error: adolescencia no viene de adolescer. Adolescencia viene del latín adolescentia que significa crecer o arder.

Ya comentaré en estos días, esta entrada y las demás.

Saludos
Arturo Panana.

Anónimo dijo...

Cometes un grave error al pensar que porque este periodo en el crecimiento de la persona, la "adolescencia" se denomine de esa manera DEBA significar "adolescer".
Es como decir que el término "mesa" debe definir, enmarcar y delimitar a todas las mesas existentes y por existir. Tu planteo tendria validez si compararas la definicion de la OSI con alguna definicion a su altura, como de algun psicologo, sociologo, pedagogo, o algun especialista profesional (como muchos de los que trabajan en la OSI) que se especialice en adolescentes.

Por ahora no deja de ser un planteo completamente irracional y sin fundamentos.

A mi entender el replanteo del período adolescente es sumamente beneficioso, para tratar de comprender al joven no como un rebelde total y sin causa, sino como una persona atravesando cambios y rupturas en muchas formas.

Saludos.