Walter Cassaro desde la Argentina
Veo con preocupación estos enfrentamientos, espero me permitas compartir estas líneas con quienes leen Logros y Metas.
En los últimos 40 años han desfilado por el cargo de jefe scout nacional diferentes personajes.
Creo que cada uno destacó en algún aspecto, que ya quisiéramos tener entra las cualidades personales de nuestros jefes de grupo, algunos dirían que Elias Mendoza o Gastón Soto, por su poder de dirección y gerencia, otros al recordado Augusto Chian por su calidad personal…
Tengamos o no estima o aprecio personal por ellos, creo que esos dones les permitieron gobernar, muy al margen del éxito de su gestión, al margen de los vacios legales o al margen de los problemas serios que siempre tuvo en la ASP.
Como dije líneas arriba ojala tuviéramos esos dones en nuestros jefes de grupo, me pregunto ¿Cuántos de los grupos de hoy quisieran tener al actual jefe scout nacional como jefe de grupo?
En una reunión días antes de la última asamblea ordinaria el hermano scout, dentista y consejero, sugería que Iván debería jugar básquet o hacer alguna actividad para que se sienta realizado y no insista en volver a ser jefe scout nacional, en la misma reunión mi paisano banquero y de apellido ingles menciono lo siguiente: "a Iván el saco le queda grande".
Puedo mencionar a muchas personas del equipo nacional y del consejo directivo que descalifican completamente a Iván para el cargo que tiene y sin embargo no se lo dicen.
No sé quién es más responsable en esto si el rey presumido que camina desnudo o su corte que no se anima a decírselo.
Que importante es que los dirigentes jóvenes retomemos el cariño por hacer las cosas paso a paso, subir escalón por escalón, primero destacar unos años en el Grupo, otros años en la Localidad, otros años en la Región, otros años en algún equipo o comisión nacional, antes de pretender ser jefe nacional.
Y qué importante es saber respetar a las personas sin dejar de ser honestos, contundentes y frontales.
Espero no haber ofendido a nadie, creo que el respeto y la honestidad pueden acampar en la misma carpa.
Con aprecio desde Buenos Aires, Walter Casaro
Veo con preocupación estos enfrentamientos, espero me permitas compartir estas líneas con quienes leen Logros y Metas.
En los últimos 40 años han desfilado por el cargo de jefe scout nacional diferentes personajes.
Creo que cada uno destacó en algún aspecto, que ya quisiéramos tener entra las cualidades personales de nuestros jefes de grupo, algunos dirían que Elias Mendoza o Gastón Soto, por su poder de dirección y gerencia, otros al recordado Augusto Chian por su calidad personal…
Tengamos o no estima o aprecio personal por ellos, creo que esos dones les permitieron gobernar, muy al margen del éxito de su gestión, al margen de los vacios legales o al margen de los problemas serios que siempre tuvo en la ASP.
Como dije líneas arriba ojala tuviéramos esos dones en nuestros jefes de grupo, me pregunto ¿Cuántos de los grupos de hoy quisieran tener al actual jefe scout nacional como jefe de grupo?
En una reunión días antes de la última asamblea ordinaria el hermano scout, dentista y consejero, sugería que Iván debería jugar básquet o hacer alguna actividad para que se sienta realizado y no insista en volver a ser jefe scout nacional, en la misma reunión mi paisano banquero y de apellido ingles menciono lo siguiente: "a Iván el saco le queda grande".
Puedo mencionar a muchas personas del equipo nacional y del consejo directivo que descalifican completamente a Iván para el cargo que tiene y sin embargo no se lo dicen.
No sé quién es más responsable en esto si el rey presumido que camina desnudo o su corte que no se anima a decírselo.
Que importante es que los dirigentes jóvenes retomemos el cariño por hacer las cosas paso a paso, subir escalón por escalón, primero destacar unos años en el Grupo, otros años en la Localidad, otros años en la Región, otros años en algún equipo o comisión nacional, antes de pretender ser jefe nacional.
Y qué importante es saber respetar a las personas sin dejar de ser honestos, contundentes y frontales.
Espero no haber ofendido a nadie, creo que el respeto y la honestidad pueden acampar en la misma carpa.
Con aprecio desde Buenos Aires, Walter Casaro
Tomado de Logros y Metras N°352
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