El futuro es muy importante para cualquier ser viviente en este mundo. Sin ello, imposible de proyectarnos. Pensamos, por ejemplo, ¿qué voy hacer cuando sea grande, dónde voy a vivir, con quién voy a estar acompañado, qué voy a estudiar o a qué institución voy a pertenecer para que me ayude en mi formación de vida?, y qué se yo, cuántas preguntas más nos hacemos, pensando en el futuro.
En el caso de los que estamos involucrados por más de cuatro décadas en una institución que hemos visto y asumido como parte de nuestra vida, llena de valores y que nos ha permitido desarrollarnos en plenitud con mucha responsabilidad, al igual que muchos hombres y mujeres que encontramos en el Movimiento Scout, una institución, una familia que nos orientó, nos guió y nos formó como su fundador lo pidió, para que dejemos éste mundo en mejores condiciones en que la hemos encontrado y que hoy, lamentablemente, a puertas de celebrar un Centenario, nos encontremos con la triste realidad que va desapareciendo lentamente, como el enfermo que no tiene cura o acaso, lo más terrible, estaríamos lamentándonos, en el futuro, de un epitafio “FUE UN MAGNÍFICO MOVIMIENTO PARA LA NIÑEZ Y JUVENTUD”.
Y la pregunta es ¿Y qué hacemos?. Para ello, amigos lectores, desde éste humilde órgano informativo, siempre hemos levantado nuestra voz, pero una voz que siempre cayó en el desierto, y no solamente nosotros, hoy en día son muchas las voces que se levantan como pidiendo al Todo Poderoso que nos ayude, a no lapidarlo.
Las estadísticas son claras, en 1979 éramos 16,792 miembros; en 1980 éramos 18,000, hoy en día al 2010, somos 4,000 miembros. Esto no es asombroso?. ¿No nos da pena, esta triste realidad?. ¿No piensan en un futuro serio, las personas que, supuestamente, se han atribuido cargos irregularmente, a nivel nacional?.
Con algunos de mis hermanos scouts de provincias, siempre comentamos esta triste realidad y muchos de ellos me dicen, pero César, ya no pongas más leña al fuego, deja de lado tus comentarios y preocupémonos por el Escultismo de nuestras provincias que es sano, fuerte. Qué nos interesa la cabeza. Ellos, no dejan de tener razón, pero, esto era antes hace por lo menos dos décadas atrás, hoy la verdad, que todo ha cambiado, que lo único que nos queda es hacer Escultismo encerrado en nuestro propio grupo, por respeto de esos niños y niñas que nos siguen y de esos Padres de Familia que todavía siguen confiando en nosotros.
Con todo el aprecio y cariño que les tengo a mis buenos amigos provincianos, debo confesarles que no me puedo quedar callado, no puedo cruzarme de brazos y esperar que el barco se hunda, no por favor, tenemos que unirnos y hacer algo, que al respecto, ya se sienten voces como las del Dr. Elías Mendoza Habersperger, una eminencia en nuestro Movimiento Scout Peruano y Mundial y que esperamos nos den buenos y halagadores resultados.
Hace cuatro años que las supuestas actuales autoridades que se encuentran al frente del Movimiento Scout Peruano, lamentablemente, no están reconocidas por los órganos oficiales de nuestro país y que tienen la responsabilidad de fiscalizar a cualquier institución que funcione, queramos o no, son normas para una comunidad civilizada, pero éstos señores hacen caso omiso a las normas o leyes de un Estado de derecho que nos asiste, y esto es muy grave.
Los Señores Kenneth Mckenzie Pulido e Iván Rivarola, Presidente y Jefe Scout Nacional, tienen una gravísima responsabilidad, en estos momentos, de lo que le viene sucediendo al Escultismo Nacional, sino veamos que dicen desde los cuatro vientos, como por ejemplo el amigo Alfredo Muente, quien desde los Estados Unidos, sugiere a Kenneth Mckenzie, que renuncie por la salud del Movimiento Scout Peruano y agregaríamos algo más, y todos aquellos impostores o usurpadores, que mucho daño vienen haciendo al Movimiento Scout Peruano que, por décadas se ganó, con mucho esfuerzo y dignidad, un sitial preferencial, en la Sociedad Peruana, y por ende en la mente y los corazones de niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos.
Amigos, quisiera seguir y seguir escribiendo, pero mi Proyecto Navideño y los niños que me aguardan, es una muestra que el GRUPO SCOUT CHICLAYO 38, sigue haciendo un verdadero Escultismo, sin engaños, sin egoísmos y con la transparencia que siempre nos ha caracterizado y enseñaron esos viejos dirigentes de alto calibre y que amaron y entregaron su vida por una institución digna y esperanza de toda una niñez y juventud, en la década de los 60, 70 y 80, tales como: P. Gerardo Muller, P. Armel Becquet, P. Lucho Giles, Ing. Augusto Chian, Gastón Soto Vallenas, Roberto Azaña, John Abba, Daniel Oscar Tagata, Michael Hudson, José Chang Bellido y muchos otros que en este momento la nostalgia y la mente, no me ayuda, pero siempre los tengo presentes, porque marcaron muy hondo mi vida y porque los niños que hoy tenemos y los he tenido por 42 largos años, se merecen eso: respeto, ejemplo, sacrificio, entrega y muchos otros valores, de quiénes los guían y los forman, para un FUTURO MEJOR.
Director, César Orrego Calderón
Chiclayo, 17 de octubre de 2010
Tomado de Logros y Metas 341
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